Le llamaban George y estaba solo, muy solo. Era el último de su especie, Chelonoidis abingdonii,
una de las tortugas gigantes de las islas Galápagos, en el Pacífico, en
la línea del ecuador y a unos 1000 kilómetros al oeste de la costa de
Sudamérica. Era el último y por eso se le conocía como el “Solitario”
George. Entonces era la criatura más rara del mundo, según el criterio
de rareza de los zoólogos, ya que era el único ejemplar de su especie.
Vivía en la isla Pinta, la de más al norte del archipiélago y una de las
de menor tamaño, con unos 60 kilómetros cuadrados de superficie. Y el
“Solitario” murió el 24 de junio de 2012, cuando iba al bebedero y,
parece ser, de un paro cardíaco. Encontró el cadáver su cuidador, el
guarda forestal Fausto Llerena. Como las tortugas de las Galápagos viven
entre 80 y 130 años, se supone que George nació entre 1903 y 1919.
link:
El caso del “Solitario” George
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se bienvenido y comenta! recuerda, se respetuoso y no insultes o los comentarios seran eliminados.